DEVOCIONAL DIARIO
Salmo 25. 4-7.
En la segunda estrofa el orante pide a Dios sabiduría y dirección, el pedir dirección va asociado a la confianza, usted no pide dirección a una persona ajena a su destino final, no solo le pide dirección, le pide que le enseñe a ser obediente a sus normas, la confianza de quien orar no está en sus méritos propios, no está en su dignidad, sino en la verdad de Dios.
Recordemos que la verdad de Dios es Jesús, él mismo lo dijo en Juan 14.6, «Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí»; la confianza del escritor es en la verdad de Dios que también es libertad, Jesús también dijo: «Jesús les dijo a los judíos que habían creído en él: Si ustedes obedecen mis enseñanzas, serán verdaderamente mis discípulos; y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres», según Jesús no es solo conocer su Verdad es también creer en él de tal manera que le obedeces y cierra la estrofa invocando cualidades de Dios, su amor, su misericordia, su bondad, todas ella cualidades a las que podemos acudir cuando hemos pecado.