DEVOCIONAL DIARIO
Salmo 31.11-16
Quien vive una experiencia de depresión o de mucho dolor, comúnmente tiende a aislarse, se encierra en su dolor, percibe el mundo que le rodea indiferente a lo que le sucede. El escritor de este Salmo vive esa experiencia, tanto tiempo de presión, debilita. Recordemos a Job quien expresó, «Dios ha hecho que mis hermanos y amigos se alejen de mí y me traten como a un extraño» (Job 19.13), el dolor aumenta cuando nos sentimos juzgados por los amigos al tratar de explicar la razón de lo sucedido.
El escritor del salmo, además siente como se hacen planes para desecharlo. Así nos sentimos todos cuando pasamos por momentos difíciles, en la casa, en el trabajo, cuando sentimos que nos desechan, o nos enmarcan en algo que no somos nosotros. Pero en los, versículos 14-16, está la salida a una experiencia dolorosa o de depresión, es confiar en Dios, es entregar la vida entera a Dios.
La recomendación del orante no es que empiece a declarar victoria sobre la situación, la verdad es que en momentos de dolor y depresión una confesión positiva solo pasa a ser un mantra sin efectos; pero aquí la recomendación no es que digas mantras es que te recuerdes a ti mismo en quien has confiado a quien le has entregado tu vida y apeles a su misericordia.