LECTURA TEMÁTICA
Esperanza en su reinado de Paz
Apocalipsis 19.1-10
19 Después de esto, oí las fuertes voces de una gran multitud que decía en el cielo:
«¡Aleluya!
La salvación, la gloria y el poder
son de nuestro Dios,
2 porque él juzga rectamente y con verdad;
pues ha condenado a la gran prostituta
que con su prostitución corrompió al mundo;
ha vengado en ella
la muerte de los siervos de Dios.»
3 Luego volvieron a decir:
«¡Aleluya!
El humo de ella nunca dejará de subir.»
4 Y los veinticuatro ancianos y los cuatro seres vivientes se postraron hasta el suelo y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono. Y decían: «¡Amén! ¡Aleluya!» 5 Desde el trono se oyó entonces una voz, que decía:
«¡Alaben a nuestro Dios
todos ustedes, pequeños y grandes,
todos ustedes que lo sirven
y le tienen reverencia!»
Canto de alabanza
6 Oí también algo como las voces de mucha gente, como el sonido de una cascada y de fuertes truenos. Decían:
«¡Aleluya!
Porque ha comenzado a gobernar el Señor,
nuestro Dios todopoderoso.
7 Alegrémonos,
llenémonos de gozo y démosle gloria,
porque ha llegado el momento
de las bodas del Cordero.
Su esposa se ha preparado:
8 se le ha permitido vestirse
de lino fino, limpio y brillante,
porque ese lino es la recta conducta
del pueblo santo.»
9 El ángel me dijo: «Escribe: “Felices los que han sido invitados al banquete de bodas del Cordero.”» Y añadió: «Éstas son palabras verdaderas de Dios.»
10 Me arrodillé a los pies del ángel, para adorarlo, pero él me dijo: «No hagas eso, pues yo soy siervo de Dios, lo mismo que tú y tus hermanos que siguen fieles al testimonio de Jesús. Adora a Dios.»
Pues ese testimonio de Jesús es el que inspira a los profetas.